lunes, 3 de diciembre de 2007

LA VIDA SIGUE IGUAL



Despues de la jornada 14, volvemos a estar igual que en la 12 pero con 2 partidos menos por jugar, es decir, el Madrid a 4 puntos del Barça y un Villarreal que padece de vertigo cada vez que se ve alla arriba en las alturas. Como invitado especial tenemos al Atleti, que parece que este año se va afianzando en la zona Champions, dejando atras añitos en el infierno, el sindrome Torres y demás historias, pero el Atleti es el Atleti y son capaces de lo mejor y de lo peor asi que seguiremos a la expectativa.

En lo negativo aparece el Valencia, vapuleado por el Athletic en casa, ahora se dan cuenta de que el culpable quizás no era Quique. Momentos complicados para un club sumido siempre en guerras civiles de accionistas y con el complejo de querer ser como Madrid y Barça, el día que se den cuenta de que cada año esto no es posible seguramente les irán mejor las cosas. Y ojito con el Zaragoza que empieza a hacer demasidas tonterias...

Respecto de los dos grandes, el Barça sigue empeñado en ir perdiendo fuera lo que gana en casa, el sabado empezó muy bien el partido, con una muy buena primera parte, pero perdonó y acabó pagando. En la segunda parte el Espanyol salió a por todas, comiendole terreno al FCB y al final tanto va el cantaro a la fuente que al final se rompe. Por encima de todos volvió a sobresalir la figura de Leo Messi, el fántastico que vale por cuatro y que ahora mismo es el jugador más desequilibrante de la plantilla culé (virgencita que no se nos resfrie). Fue valiente Rijkaard volviendo a dejar a Ronaldinho en el banquillo, que está para jugar 15 o 20 minutitos como mucho, estaremos a la expectativa de lo que digan sus palmeros en el Mundo deportivo.
El Madrid sigue con su tranquila intranquilidad habitual. Tranquilos porque se ven capaces de todo (hasta Raul mete goles de falta) pero a su vez intranquilos porque hasta el más forofo de los aficionados reconocería las debilidades del equipo en defensa. De momento 4 puntos por encima del Barça que no es poco, después de un plácido partido contra el Racing.

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